Arándanos
Los han catalogado como la fruta con mayor poder antioxidante, pero sus beneficios no se quedan solo ahí. Descúbrelos en la siguiente nota.
Desde aliviar el estrés hasta normalizar la presión arterial se puede lograr con estos alimentos.
Calmar ese dolor de cabeza o recuperarse de la fatiga diaria, son problemas que no requieren de un medicamento, se pueden superar recurriendo a algunas de las frutas que se encuentran en casa.
El plátano sirve para el estrés o la ansiedad. Uno de un tamaño promedio tiene 105 calorías y 14 g de azúcar. Eentrega un leve aporte de energía, y el 30% del consumo diario necesario de vitamina B6, que libera serotonina en el cerebro y ayuda a superar las tensiones de la rutina.
Las pasas permiten reducir la presión arterial elevada. Para esto basta con un puñado de ellas para entregar un gramo de fibra y 212 mg de potasio, lo que corresponde a recomendaciones de la dieta Dash, considerada la más efectiva para combatir la hipertensión. Además, los polifenoles que contienen son buenos para la salud cardiovascular.
Los damascos ayudan a prevenir los cálculos renales, ya que solo ocho mitades de damascos deshidratados contienen dos gramos de fibra, solo 3 mg de sodio y 325 mg de potasio.
Este cóctel de compuestos impide que se acumulen minerales en la orina y que se formen pequeñas piedras de calcio.
La pera permite combatir el colesterol. Una de tamaño mediano tiene 5 g de fibra, gran parte en forma de pectina, la que ayuda a eliminar el colesterol malo y cuidar el corazón.
Los higos ayudan al tránsito intestinal y evitan la aparición de hemorroides. En cuatro higos secos hay 3 g de fibra. Además contienen el 10% del manganeso necesario.
El jugo de naranja es la fructosa y la vitamina C contenida en 120 cc, que entrega energía y ayuda a metabolizar el hierro, lo que oxigena mejor todos los tejidos del cuerpo.
Alimentos con Fibra
Desayuno
Media mañana
Al medio día
Merienda
Cena
Alimentación Nutritiva
1. Verduras
Laa importancia que tienen las verduras en la alimentación. Aportan vitaminas, minerales y fibras, son fáciles de preparar y son un excelente acompañamiento para cualquier plato.
“Hay que aprovechar siempre las verduras de estación y preparar con ellas ensaladas, tortillas y budines. Son ideales como acompañamiento cuando se quiere reducir el aporte calórico de un plato principal”, dice Ana Palacio.
2. Frutas
La nutricionista Silvana Meli, sugiere consumir dos tazas de frutas al día, durante la mañana o a mediodía, y evitar comer chirimoyas, plátanos y frutos secos, porque son muy ricos en azúcar.
También hace hincapié en los beneficios que los berries nos pueden brindar: “Aportan potentes antioxidantes que nos ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas y cáncer. También colaboran a mantener una piel más joven y saludable”, explica.
3. Pollo y atún
Si el atún viene en lata, debe ser al agua. Estas carnes blancas son escenciales para agregarle el aporte proteico a cualquier comida. “El pescado es una carne de fácil digestión, rica en omega 3 y ayuda a prevenir infartos”, explica Silvana Meli.
Ana Palacio agrega que el pollo, al igual que el atún, es una buena fuente proteica. “Además es fácil de preparar y queda muy bien combinado con vegetales como cuando preparamos un chapsui”, dice la especialista.
4. Aceite de oliva
Infaltable en las cocinas, no solamente para hacer una preparación sino que también para aderezar comidas. “Lo uso principalmente para aliñar las ensaladas, ya que no cocino con aceite.
Es más, trato de no usar más de una cucharadita por plato. Lo bueno de este aceite es que aporta grasas insaturadas que ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares”, dice Bernardita Vignola.
5. Huevos
Además de ser muy barato, se pueden preparar de diversas formas y consumir en cualquier comida del día. Son un alimento completo, ya que aportan proteínas de excelente valor y son ricos en vitaminas y minerales.
“Tres claras aportan 10 gramos de proteína de muy buena calidad”, afirma Ana Palacio. Además, comerlo a diario reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes, cataratas y cáncer.
6. Legumbres
Tienen un gran valor nutricional. A las personas que no consumen carnes rojas se les recomienda comer legumbres como las lentejas o los garbanzos para compensar el aporte de hierro. “Las recomiendo mucho porque es un alimento de bajo costo pero de gran valor nutricional.
Además tienen un gran poder de saciedad, contienen carbohidratos de excelente calidad que no eleva demasiado el azúcar en la sangre y son una muy buena fuente de proteína vegetal, fibra y hierro”, asegura Silvana Meli.
7. Arroz, pastas, cuscús
Cuando escuchamos carbohidratos, inmediatamente nos imaginamos subiendo de peso. Pero no siempre es así. Las pastas, el arroz o un puñado de cuscús también deben ser parte de la alimentación.
“Yo cuido mi alimentación y eso no significa que no consuma carbohidratos, porque son primordiales para mantener una alimentación saludable. Todo recae en la porción. Si esta es adecuada se pueden incluso consumir en la cena”, explica Bernardita Vignola.
8. Yogur o leche descremada
Silvana Meli afirma que el yogur natural es mejor. “Aporta minerales como calcio, magnesio y fósforo y contiene prebióticos, que equilibran la flora intestinal protegiéndonos de bacterias dañinas”, explica.
Ana Palacio, en cambio, apuesta por la leche descremada. “Aporta proteínas de calidad y hay una gran variedad de leches en cajas con sabores”, afirma.
9. Jugos en polvo light
No cabe duda de que hidratarse es fundamental para mantenerse sana. Las nutricionistas recomiendan tomar de dos a tres litros diarios de agua y ojalá que esté purificada, porque trae menos cloro y flúor que deterioran la flora intestinal.
“No soy muy buena para tomar agua, entonces para aumentar mi consumo de líquidos compro juguitos en polvo para que no sea tan fome”, dice Bernardita Vignola.
10. Mix de semillas
De linaza, chía, pepas de zapallo, entre otras. Las semillas se pueden agregar a cualquier preparación para darles un toque especial a las comidas.
“Aportan antioxidantes que previenen el envejecimiento, tienen una fibra soluble excelente para nuestro intestino y ácidos grasos esenciales para la salud arterial. Además, les dan un exquisito sabor y un toque crujiente a nuestras ensaladas”, explica Silvana Meli.
Aceite de Oliva
Oro líquido
AOVE
La gastronomía actual no sería lo mismo sin este preciado aceite, muchos de los platos lo llevan, es altamente valorado por su sabor y propiedades nutritivas.
Por su digno color que se denomina como el oro liquido de la gastronomía.
Diferencias entre Aceite de Oliva, Oliva Virgen y Extra Virgen
La calidad de un aceite depende de muchas cosas, sobre todo del momento en que se recoge la aceituna y de lo dañada que llega a la almazara. De la centrifugadora salen 3 tipos de aceite:
Aceite de oliva lampante
- El de peor calidad, hecho con aceituna muy madura y dañada.
- Huele fuerte y rancio y tiene más de 2 grados de acidez.
- No es apto para el consumo humano
- Se usaban como combustible para las lámparas de aceite de ahí el nombre lampante.
Aceite de oliva virgen
- La primera calidad apta para el consumo.
- Un aceite con buenas cualidades organolépticas y sin mezclas.
Aceite de oliva virgen extra
- El de mejor calidad, hecho con aceitunas recogidas los primeros días de cosecha y que no han empezado a fermentar antes de llegar a la almazara.
- Tiene la mejor cata: huele a puro fruto, a oliva.
A ese refinado se la añade luego una pequeña porción de aceite virgen (no más del 20%) y se obtiene el aceite de oliva 1º (un grado) que nos venden en las tiendas como oro líquido, aunque en realidad lleva más química que aceite u oro. Si se le añade un poco más tenemos el aceite de oliva 0,4 grados.
Recomiendo que se utilice aceite de oliva virgen extra AOVE también para freír.